viernes, 28 de mayo de 2010
Plato de tritones receta para el domingo
En vuestro estanque de ranas pescaréis varios cedazos llenos de tritones que aún no se hayan tornado en ranas; debéis cogerlos en la quinta semana de su desarrollo porque es entonces cusndo es mejor su sabor. Para hacerlos morir los pondréis por un momento en un puchero con agua que hierva intensamente, luego los limpiaréis con cuidado bajo agua fría corriente y dispondréis los cuerpos a secar sobre un paño que absorberá cualesquiera de las agua que en ellos hayan quedado. Entonces, rociadlos con una harina fina con sal y pimienta (o sal y cilantro), agitadlos en un cedazo seco para arrancarles la harina que no sea necesaria y vertidlos sobre una sartén con aceite de oiliva hirviente para que se tornen ligeramente marrones. De nuevo los dispondréis sobre un paño que pueda absorber el aceite de oliva sobrante, y cuando así haya ocurrido entonces ya pueden comerse. Algunos amantes de este plato acostumbran a derramar por encima un poco de zumo de limón. Pero también hay otros que, al conocer el contenido del plato que acaban de comer, empalidecen y abandonan la mesa con premura.
Leonardo da Vinci, Notas de cocina
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4 comentarios:
Qué interesante todo lo que aparece escrito aquí. Da gusto consultar el blog: es de lo más curioso y sutil. ¡Pues habrá que probar la receta!, a ver si algún tritón se convierte en príncipe o en especulador al caer sobre el aceite hirviente.
Yo también probaré la receta, pero si el tritón resulta ser un príncipe o un especulador, espero que lo diga antes de caer en el aceite. Qué desperdicio si no...
Aunque pensándolo mejor, quizás adapte la receta y cambie los tritones por patatones (y un poco del txakoli ese del otro post).
Para los que estais pensando en preparar la receta, os convendrá saber que conviene comprarlos con DOC (Denominación de Origen Controlada. Según mi información (Club del Gourmet) los mejores son los del Mediterráneo y los del Atlántico. Y aquí lo que me han contado de ellos:
Cuando los tritones del Mediterráneo están en tierra firme son temidos, pues su comportamiento no es el mejor, se emborrachan, violan a cualquier mujer que se cruce en su camino y causan cualquier tipo de estragos en los pueblos que visitan. Por el contrario, los tritones del Atlántico tienen un carácter más tranquilo de lo que aparentan; tienen lengua propia, pero son capaces de hablar el idioma de los humanos y de hecho les gusta la convivencia con ellos, por lo que viven más cerca de las zonas costeras que en alta mar.
Advertidos quedaís. Yo por si acaso voy a intentarlo con los del Atlántico.
Si, los otros "nunca fueron ángeles". Hacen bien en controlarles el origen.
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