jueves, 26 de mayo de 2016
Oh, lluvia. Oh, generosa.
entonces comprendimos que la lluvia también era hermosa
Sin embargo yo quería hablar de la lluvia, igual, pero distinta, ya al caer sobre los jardines, ya al deslizarse por los muros, ya al reflejar sobre el asfalto las súbitas, las fugitivas palabras de la poesía
En Boston
Entre la vejez de las calles
Y la juventud de las nubes
Paul Eluard
los versos de la lluvía son de Raul González Tuñón
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