Navega el navegante, aunque sepa que jamás tocará las estrellas que lo guían

¡Salud a la cofradía trotacalle y trotamundo!


jueves, 18 de abril de 2013

esta noche, por la calle, llueve como siempre,


y el poeta nos dice que en la noche estrellada vienes a recoger las flores que cortaste

Ayer viendo un editaje sobre del BasqueFest, el primer festival de la cultura y la vanguardia vasca que incluye arte, música, danza, diseño e innovación, deporte y gastronomía, y que se celebró en Bilbao durante la Semana Santa, escuché una canción del grupo Belako. Además, les hacían una entrevista junto a la alhóndiga donde iban a actuar ese mismo día y pasaban imágenes de la grabación de un videoclip que iba a salir en breve,"Sea Of Confusion", inspirado nada menos que ¡en Hamlet!. Tan gratamente me sorprendieron que me puse a indagar y resulta que Belako se ha convertido en el grupo de moda, en la gran esperanza del indie vasco de 2013 "con una propuesta prometedora y rompedora de de post-punk, rock alternativo de la mejor época de los noventa y con ciertas pinceladas de hardcore."  



Esta noche, por la calle, llueve como siempre, por la noche, en la calle, lloviendo me atrapa sola, siempre. Madre, los llantos se terminaron, Padre, las ganas se acabaron, siempre lloviendo. Aqui estoy esperando las señales del cometa, los malos sueños no guardan ninguna luz. Madre, los llantos se terminaron, Padre, las ganas se acabaron, vague perdido, siempre lloviendo. Noche, noche, noche... Esta noche, en la calle, llueve, como siempre,por la noche, en la calle, lloviendo me atrapa sola, siempre.

¡Ay, pobre Ofelia!



El album "Eurie" esta disponible tanto en formato digital como en cd

Visto en: bandcamp
Precio: 5,95€

Visto en: La Fnac
Precio: 11,99€ (bajo pedido)

Ofelia

I
En las aguas profundas que acunan las estrellas,
blanca y cándida, Ofelia flota como un gran lirio,
flota tan lentamente, recostada en sus velos...
cuando tocan a muerte en el bosque lejano.

Hace ya miles de años que la pálida Ofelia
pasa, fantasma blanco por el gran río negro;
más de mil años ya que su suave locura
murmura su tonada en el aire nocturno.

El viento, cual corola, sus senos acaricia
y despliega, acunado, su velamen azul;
los sauces temblorosos lloran contra sus hombros
y por su frente en sueños, la espadaña se pliega.

Los rizados nenúfares suspiran a su lado,
mientras ella despierta, en el dormido aliso,
un nido del que surge un mínimo temblor...
y un canto, en oros, cae del cielo misterioso.

II
¡Oh tristísima Ofelia, bella como la nieve,
muerta cuando eras niña, llevada por el río!
Y es que los fríos vientos que caen de Noruega
te habían susurrado la adusta libertad.

Y es que un arcano soplo, al blandir tu melena,
en tu mente traspuesta metió voces extrañas;
y es que tu corazón escuchaba el lamento
de la Naturaleza –son de árboles y noches.

Y es que la voz del mar, como inmenso jadeo
rompió tu corazón manso y tierno de niña;
y es que un día de abril, un bello infante pálido,
un loco miserioso, a tus pies se sentó.

Cielo, Amor, Libertad: ¡qué sueño, oh pobre Loca! .
Te fundías en él como nieve en el fuego;
tus visiones, enormes, ahogaban tu palabra.
–Y el terrible Infinito espantó tu ojo azul.

III
Y el poeta nos dice que en la noche estrellada
vienes a recoger las flores que cortaste ,
y que ha visto en el agua, recostada en sus velos,
a la cándida Ofelia flotar, como un gran lis

Rimbaud

4 comentarios:

Eppu dijo...

Leyendo sobre vanguardias y músicas, lástima grande que se ha muerto Josetxo Ezponda, personaje singular, especial.

de-los-bichos: verno muerto dijo...

http://www.eitb.tv/es/radio/radio-euskadi/la-jungla-sonora/945038/1315420/novedades-desde-africa-fallece-josetxo-ezponda-de-los-bichos/

Eimar Maikaas dijo...

De tierna mujer echada entre las flores
Se adivinaba la estación oculta
por el ansia de las lluvias nocturnas,
por los cambios de las nubes en el cielo,undosas leves cunas;
y yo estaba muerto.
Una ciudad suspendida en el aire era mi último exilio,
y en torno me llamaban
las suaves mujeres de otros tiempos,
y la madre, renovada por los años,
con su dulce mano escogía entre las rosas
y con las más blancas ceñía mi cabeza.
Afuera era de noche
y los astros precisos seguían ignotos caminos
en curvas de oro
y las cosas vueltas fugitivas
me llevaban a rincones secretos para hablarme de jardines abiertos de par en par
y del sentido de la vida;
pero a mí me dolía la última sonrisa
de tierna mujer echada entre las flores.
-Salvatore Quasimodo-

Anisia Serendipia dijo...

COMO LOS ASTROS, ¡PRECIOSO!