viernes, 8 de noviembre de 2013
la televisión y los que la financian
las piedras y l-o-s plumas
Canal 9 pide perdón en directo por ocultar el accidente de metro [43 personas murieron]: "Las órdenes para silenciar aquellas voces salieron del despacho de la Generalitat".(El M)
To be, or not to be, he aquí la cuestión. ¿Que es más elevado para el espíritu, sufrir los golpes y dardos de la insultante fortuna o tomar armas contra el piélago de calamidades y, haciéndoles frente, acabar con ellas? Morir..., dormir; no más ¡Y pensar que con un sueño damos fin al pesar del corazón y al los mil naturales conflictos que constituyen la herencia de la carne! ¡He aquí un término devotamente apetecible! ¡Morir... dormir, tal vez soñar! ¡Si, ahí está el obstáculo! Pues es forzoso que nos detenga el considerar qué sueños pueden sobrevivir en ese sueño de la muerte, cuando nos hayamos liberado del torbellino de la vida. ¡Esta es la reflexión que da tan larga vida al infortunio! Pues ¿Quién soportaría: los ultrajes y desdenes del mundo, los agravios del opresor, las afrentas del soberbio, los tormentos del amor desairado, la tardanza de la ley, las insolencias del poder y los desdenes que el paciente mérito recibe del hombre indigno, Cuando uno mismo podría procurar su reposo con un simple estilete? ¿Quién querría llevar tales cargas, Gemir y sudar bajo el peso de una vida afanosa, Sino fuera por: Temor a algo tras la muerte, la ignorada región de cuyos confines ningún viajero retorna, Temor que desconcierta nuestra voluntad y nos hace soportar los males que nos afligen antes de lanzarnos a otros que desconocemos? Así la conciencia nos vuelve cobardes a todos y así el primitivo matiz de la resolución desmaya con el pálido tinte del pensamiento, y las empresas de gran aliento o importancia, por esa consideración, tuercen su curso y pierden el nombre de acción.
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4 comentarios:
¡Qué espanto todo, ocultar un crimen tan consciente!... y lo que aún no se sabe.
To be, or not to be, Si es mejor para el alma soportar los golpes y dardos de la ultrajante fortuna, o rebelarse contra un mar de adversidades y en dura pugna darles fin,
yo pienso, que estamos como en una comedia en la que cada uno tenemos nuestro rol y por tanto es inútil rebelarse el destino siempre se cruza de algún modo en nuestras decisiones
¡Ay!, sin embargo yo creo que es al revés. Que son cada una de nuestras decisiones las que conforman nuestro destino.
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