Navega el navegante, aunque sepa que jamás tocará las estrellas que lo guían

¡Salud a la cofradía trotacalle y trotamundo!


sábado, 15 de marzo de 2014

aquél era el lugar


dicen que hoy es el día del consumidor


¡Qué mejor ocasión [y además siendo sábado que estará a tope] para visitar el Chanel Shopping Center, bajo el techo de cristal del Grand Palais de París!





consumismo Pop Art; el lujo cotidiano... aunque nunca lo habíamos visto, lo reconocimos desde el primer instante


versos de POEMA C

También de “dentro” nos reconocieron, porque encendieron
todas las luces y abrieron de par en par todas las puertas.

Fue entonces, cuando vimos a través de los cristales, a través de
las paredes, a través de nuestra vieja ceguera, que todo lo perdido
estaba allí, reunido cuidadosamente con paciencia de amor y
silencio de fe.

Allí guardados el primer sueño, las alegrías olvidadas, la rosa
intacta de nuestra adolescencia, el agua vertical que fue al principio.

Y mientras contemplábamos suspensos la deslumbradora,
inesperada riqueza, el tiempo fue perdiendo toda su premura, y el
alma toda su angustia, y el mundo todo su imperio.

Y fue así que nos echamos a dormir al pie de las ventanas
iluminadas… Creo que sí, que nos dormimos… La noche estaba
quieta; y ya los ves: no entramos en nuestra casa.

Dulce María Loynaz

4 comentarios:

estrella dijo...


Gracias por recordármelo, ahora que lo sé no salgo de casa!...

Anisia Serendipia dijo...

Recuerdo que los Hollister iban los sábados al centro comercial y a mí me parecía "lo más". Eso que la idea que yo tenía de un centro comercial era una sitio al que me llevaron una tarde de un sábado en Grenoble, tenía 12 años, y me comí un perrito caliente con mostaza. No la había probado nunca y me encantó.

I. Solano dijo...

A mí me parece muy triste desde siempre la compra del sábado en el supermercado. Se añora mucho el establecimiento cercano, el comercio pequeño en el que se tienen conversaciones, la compra "al día" sin tener que ir en coche y acarrear para toda la semana. Mientras se pueda hacer, ¡que no cambie!.
El supermercado Chanel ¡es precioso, qué suerte tener dinero para verlo todo tan elegante!.Aunque la elegancia también es andar en calma y comprar a diario con el paquete necesario bajo el brazo sin pasar por los centros comerciales.

Breo dijo...

El poema es precioso, gracias.